Ven nuevamente a la Vida.

Somos solo una neblina,
somos viento, simple aire es nuestra vida.
Cerramos los ojos
y todo se esfuma,
en un instante todo se termina.
No podemos detenerlo,
cuando se acaba la vida
nuestra mente se marchita.
De nada valen las cosas
que creíamos un día,
se pierde todo al instante,
y hasta el recuerdo se olvida.
Los proyectos no se realizan,
nuestra vida se convierte
en eterna despedida.

Gracias a Dios que tenemos
una esperanza muy viva,
algo a que aferrarnos,
el no nos deja a la deriva.
Todos ansiamos el día,
en que nuestro llanto
se torne en alegría.
Todos ansiamos el día,
en que recobren la vida,
tantos seres queridos
que se durmieron un día.
Aférrate a la esperanza,
y podrás vivir el momento,
ese anhelado instante
cuando el con voz Fuerte les diga:
Ven nuevamente a la Vida.